Esta expresión se utiliza asociada al Comercio exterior y el Comercio Internacional entre países.
diferencia económica que supone para un país, región o ciudad que la sede central y, por tanto, la toma de decisiones de las empresas estén ubicadas dentro del país. No importa dónde se produzcan los Bienes o se presten los servicios o el idioma que hablen los operarios de la cadena de montaje, la manifestación más importante de la nacionalidad empresarial sigue siendo la localización de la sede central.
Es precisamente junto a ellas donde se desarrolla un conjunto de actividades de alto Valor añadido, se utilizan tecnologías más avanzadas y se crean redes de Empleo y servicios altamente remunerados, que además, desde un punto de vista de imagen, se consideran más deseables y nobles para la Sociedad. Entre estas actividades pueden citarse las financieras, de mercadotecnia, legales, de investigación, diseño y Desarrollo, las de ingeniería y la política de directivos.
Casi no se conocen compañías que tengan sus principales centros de investigación en el extranjero y sus actividades del montaje en la sede central, y es precisamente cerca de la sede central donde las empresas pueden colaborar y apoyar con el sistema científico y tecnológico del país. Cuantas más sedes y más diversificadas tenga un país, mayor es su Renta per cápita.
Cuando un país o región atrae sedes corporativas, también atrae servicios empresariales, una Bolsa de trabajadores altamente cualificados y sedes de otras compañías.
De ahí que, cuando se produce el traslado de una sede a otro país, los gobiernos se muestren preocupados por las consecuencias negativas que ello puede acarrear en términos de pérdida de Empleo y de Mercado.