Expresión utilizada en Macroeconomía, a nivel de los agregados económicos y monetarios.
Es aquella Inversión realizada en un país, a través de alguna de las vías que establece la ley transferencia de Capital desde el exterior por parte de un Estado extranjero, una persona natural o jurídica extranjera o una nacional con residencia y domicilio en el exterior.
Existen dos modalidades principales de Inversión Extranjera, la directa y la indirecta o de portafolio.
La primera es aquella en que el inversionista extranjero busca controlar la Empresa, y hacerlo por un Tiempo relativamente largo.
La segunda es aquella en que el inversionista busca una Utilidad que puede materializarse a corto Plazo, no estando por lo general interesado en el control del proyecto y se realiza a través de la compra de Acciones o de cuotas de Fondo de Inversión.
Los países latinoamericanos, después de la Segunda Guerra Mundial, tuvieron una actitud muy negativa hacia la recepción de inversiones extranjeras. Guiados por criterios de Nacionalismo Económico vieron en ellas una forma en que el Trabajo local enriquecería a los capitalistas foráneos, aumentando a la vez la Dependencia con los centros financieros de poder. Actualmente, y luego de una larga experiencia, tal actitud ha cambiado casi totalmente.
Ahora se concibe al Capital extranjero como una fuente de Trabajo que estimula el proceso productivo y se busca, en cambio, detener la exportación de capitales que hacen los nacionales de un país, procurando más Bien la repatriación de los activos que salieron durante el período de excesiva inestabilidad política e Intervencionismo gubernamental que concluyó en la década de los ochenta.
En inglés foreign investment.
Ver Control de Cambios; Política Comercial.
Consulta sección Macroeconomía