Algunos de los planteamientos de Becker parecen simples y obvios. Pero, parte de su genialidad consiste en explicar, en términos simples, conceptos económicos que a veces nos cuesta relacionar con las Acciones que realizamos frente a nuestra propia vida.
En sus comienzos, el Trabajo de Becker sufrió la resistencia de los economistas más tradicionales, ya que abordaba temas que hasta entonces eran propios de la psicología y la sociología. De hecho, él mismo llegó a decir que "durante treinta años no fui percibido como un verdadero economista". Sin embargo, con el Tiempo -y principalmente gracias a los economistas más jóvenes- sus interesantes análisis comenzaron no sólo a ser aceptados, sino también a entusiasmar a muchos.
Lo que busca mostrar Becker es que la racionalidad económica se aplica a todos los comportamientos de las personas. Por ejemplo, él considera el núcleo familiar como una pequeña Empresa (que hace análisis de Costo-Beneficio en cuanto a Tiempo y Dinero), concluyendo que a medida que aumentan los Ingresos de la familia, los padres invierten más Tiempo y Dinero en la educación de sus hijos, junto con limitar el tamaño del grupo familiar.
Así, desde el punto de vista económico, los niños pueden ser considerados Bienes de Consumo que, al igual que otras mercancías, producen satisfacciones y tienen un precio. El precio consiste en el Tiempo y en los Bienes asociados a su crianza. Además, es fundamental el costo de oportunidad de la madre. A medida que la mujer es más exitosa, el Costo de tener un hijo va siendo mayor. Por otra parte, en muchos países subdesarrollados, los niños representan unidades de Trabajo directo que permiten aumentar el ingreso familiar.
De la misma manera, Becker visualiza el matrimonio como un contrato que tiene Costos y beneficios. El Costo es sacrificar independencia y asumir compromisos. El beneficio es que el matrimonio proporciona compañía y la oportunidad de especializar el Trabajo en el hogar. ¿Y las relaciones prematrimoniales? Simplemente deben ser consideradas como una Inversión en información sobre la pareja.
En el ámbito de la delincuencia, Becker también hace un análisis interesante: si se castiga de manera más drástica a los criminales, necesariamente deberá bajar la delincuencia. Esto porque los individuos evalúan los beneficios y los Costos antes de cometer un delito, de forma tal de utilizar los medios más eficaces para el logro de determinados ilícitos. Por ejemplo, si se aumenta el "Impuesto" a las armas (que se refleja en mayores condenas para aquellos antisociales que usen pistolas), necesariamente deberá bajar el uso de éstas a la hora de delinquir.
El libro más famoso y leído de Gary Becker es Capital humano (1964). En esta obra planteó que una fuerza de Trabajo Bien entrenada es un importante Activo para un país, puesto que la capacitación de los trabajadores aumenta la capacidad productiva de la fuerza laboral. Asimismo, recomendó la eliminación del salario mínimo para incentivar a las empresas a contratar un mayor número de desempleados.
De su obra del último Tiempo, es interesante su posición contraria a la unión monetaria del euro en el continente europeo. En los años que se discutía la conveniencia de tener una Moneda única, Becker planteó precisamente lo contrario: que se introdujera una Competencia de monedas en todo el continente de forma tal de que se redujeran los incentivos a financiar con Inflación el Déficit presupuestario de los "gobiernos irresponsables". Las monedas perderían Valor si los gobiernos intentaran salir de sus aprietos fiscales con Inflación, ya que las personas y las empresas harían sus transacciones en otras monedas más estables.